Los encantos de una depresión repleta de preguntas, preguntas con respuesta rápidas y fáciles ,baratas ,salvajes y propias del reflejo de un paraíso ciego. Al mismo tiempo que el temor de un futuro e inexistente aburrimiento nos frena a responderlas mientras nos pasamos escuchando el clásico canto por donde todo el mundo pasa… Adecuo mi sensualidad a libros de justicia. Que ni me van , ni me vienen. Estoy entre flores repletas de polen ante mis pies, no dudo en desaprovechar ese momento, mi momento . Añoro a todo aquel que se acordó de mi cada vez que hablaba de locura inteligente…Si dijera adiós, quizás el cielo me perdonaría.